El Sindicato de Enfermería SATSE-Córdoba ha denunciado la negligente situación en la que han quedado los hospitales de Cabra y Pozoblanco para dar cobertura asistencial y de cuidados a la población de las zonas afectadas del Norte y Sur de la Provincia en las que son referentes hospitalarios cada uno de ellos.
La gravedad de la situación es tal que, según el Sindicato de Enfermería, "se está poniendo en riesgo la seguridad del paciente como consecuencia de la falta de enfermeras para dar cobertura asistencial y de cuidados en óptimas condiciones", con independencia de la repercusión que esta situación, junto con el cierre de camas, tiene en el incremento de las listas de espera y en las demoras inaceptables para ser atendido con agilidad y calidad.
SATSE recuerda que en lo referente a la falta de enfermeras, el hospital de Pozoblanco solo ha dispuesto contratos de sustitución por vacaciones para el 30% de los profesionales y que el de Cabra ha reducido en 19 enfermeras los contratos estructurales de 6 meses.
En lo referido a las matronas, ni el hospital de Pozoblanco ni el de Cabra han realizado contrato alguno, con la clara repercusión que ello tiene en la atención a la mujer al tener que suspenderse programas vitales como la educación al parto; salud sexual y reproductiva; prevención cáncer de cuello de útero, mama y genital; atención al climaterio y atención al suelo pélvico, incontinencia urinaria...
"Tampoco los Fisioterapeutas han escapado a la torba economicista de la Administración Sanitaria en un claro alarde de prioridad económica respecto de la seguridad, la calidad asistencial y la agilidad en la atención y cuidados a la población", señalan desde el sindicato.
SATSE asevera que "es inaceptable que esto sea la manera que tiene la Administración Sanitaria de proteger la sanidad pública en estos hospitales cuando ni siquiera respeta la dotación de los servicios mínimos que la propia Administración impone ante una jornada de huelga".
Finaliza SATSE confirmando públicamente una vez más que no permanecerá pasivo ante este ataque sin precedentes a la calidad y seguridad asistencial que ha de protegerse en nuestra sanidad pública.
