EQUO reclama la eliminación del Toro de Cuerda de Carcabuey por maltrato animal
El partido ecologista insta a la Junta de Andalucía a la suspensión de toda actividad que conlleve maltrato animal en fiestas y ferias de Andalucía
La formación ecologista rechaza de pleno el Toro de Cuerda que tendrá lugar en la localidad cordobesa de Carcabuey el 9 de septiembre con motivo de las fiestas patronales de la Virgen del Castillo.
El Reglamento de Espectáculos Taurinos Populares de Andalucía prohíbe taxativamente, en su artículo 5.3 aprobado por Real Decreto 62/2003, el uso de sogas y cuerdas para sujetar a los animales y el maltratar, herir, pinchar, golpear o tratar cruelmente a las reses, como dicta el sentido común, ya que estas prácticas producen sufrimiento psíquico y físico en ellos.
Prohíbe así mismo los siguientes tipos de festejos taurinos populares: Festejos que consistan en embolar las defensas de las reses, prendiendo fuego al material o sustancia con la que se ha realizado el embolado, festejos que consistan en sujetar antorchas u otros elementos similares a los cuernos de las reses y festejos que consistan en atar o limitar el movimiento de las reses mediante la utilización de maromas, sogas o de cualquier otro elemento similar, salvo cuando ello sea necesario para llevar a cabo la recogida de aquellas a fin de dar por concluido el festejo.”
Sin embargo, este mismo Reglamento, en su disposición adicional primera, crea una excepción con aquellos espectáculos que tienen una tradición acreditada, entre los que nombra a Carcabuey y a otros municipios andaluces.
En este caso, el más básico sentido común, el de proteger a los animales como son los usados en estos festejos, se hace añicos por la calificación como Fiesta de Interés Turístico. Que los animales sufren y no están adaptados a estos espectáculos es irrefutable. Los informes sobre el estrés y el sufrimiento de los bóvidos, están recogidos en numerosos artículos científicos, y así lo corroboran numerosos estudios de la Asociación AVATMA.
Ana María Carnero coportavoz de EQUO Córdoba, ha vuelto a insistir de que “se elimine definitivamente de todas las programaciones el maltrato animal en los festejos y fiestas de Andalucía”. Comenta además que “desde EQUO rechazamos y condenamos de manera enérgica todo tipo de utilización de animales en fiestas locales, reprobando en especial aquellas actividades que cuenten con subvenciones y tengan entre su público a menores de edad”.
El portavoz provincial de EQUO, Salustiano Luque, lamenta que “todavía numerosos alcaldes, alcaldesas y representantes públicos de la provincia y de la Junta de Andalucía sigan justificando la promoción de las fiestas tradicionales y populares en torno al mundo del toro por su repercusión económica y cultural, obviando el maltrato animal que en todas ellas se producen hacia toros y novillos”. También pone de manifiesto que “aunque contamos en Andalucía con una Ley de Protección Animal desde el 2003 son muchas las excepciones de ésta que permiten actos de crueldad animal (corridas de toros, novilladas, becerradas, encierros taurinos, clases prácticas con reses celebradas por las escuelas taurinas, competiciones autorizadas de tiro pichón, concursos de arrastre, toro de cuerda…).
Concluye afirmando que “no pueden ser, bajo ningún concepto, Declaraciones de Interés Turístico de Andalucía aquellas que se sustenten en maltrato hacia los animales como es el caso de la suelta de vaquillas de El Viso. Este interés turístico tiene como objetivo poner de relieve el patrimonio andaluz, atrayendo la atención del visitante sobre aquellos recursos de especial trascendencia turística y entendemos que el sufrimiento animal y la falta de respeto y cuidados hacia los animales utilizado como diversión no pueden ser un atrayente y reclamo turístico de Andalucía, ni debería dedicarse ningún recurso económico público a ello”.
EQUO reclama a la Junta de Andalucía la abolición de este tipo de espectáculos y al Ayuntamiento de Carcabuey y demás municipios de la provincia, así como a la Diputación Provincial que dejen de promocionar, colaborar y subvencionar eventos en los que se maltraten animales y eliminen de una vez el maltrato animal de la programación de sus Ferias y Fiestas. No existe, en pleno siglo XXI, justificación ni argumentos que aplaudan un acto de crueldad con un animal.