Desde la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Fuente-Tójar, en colaboración con el Área de Cultura de la Diputación de Córdoba, se va a poner en marcha a partir del 2 de septiembre la Primera Escuela de Danzantes, con una duración inicial de cuatro meses, la cual está dirigida principalmente al aprendizaje del violín y guitarra, los dos instrumentos más difíciles.
Las inscripciones se realizarán de forma gratuita en la Biblioteca Pública Municipal y los inscritos, que pueden ser de cualquier edad, no tendrán que llevar instrumentos puesto que se han adquirido por parte del Ayuntamiento tanto violines como guitarras, con el fin de que no resulte un hándicap a las personas interesadas a la hora de inscribirse.
El objetivo es que esta escuela se consolide en el tiempo para continuar con el aprendizaje del resto de instrumentos y, por supuesto, el baile.
Desde el año 2017, el Ayuntamiento de Fuente-Tójar viene trabajando para lograr la consideración de Bien de Interés Cultural para la Danza de San Isidro labrador. En diciembre de 2018 se recibió certificado del acuerdo adoptado por la Comisión Provincial de Córdoba de Patrimonio Histórico en su sesión del 30/11/2018 por el que por unanimidad se informaba favorablemente la inserción como Bien de Interés Cultural en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz de La Danza de San Isidro Labrador de Fuente-Tójar; máxima figura de protección que puede recibir un bien, tal y como se recoge en la Ley de Patrimonio Histórico Español.
En este sentido, Mari Fe Muñoz se reunión hace unas semanas con la Delegada de Cultura de la Junta de Andalucía para solicitarle que se retomase este tema y se hiciese la designación definitiva de Bien de Interés Cultural a los Danzantes de San Isidro Labrador de Fuente-Tójar.
La Danza de San Isidro labrador forma parte del patrimonio inmaterial o “patrimonio vivo tojeño”. Desde el Equipo de Gobierno Municipal se es consciente de la importancia que supone esta danza para mantener la cultura, identidad del pueblo y sentimiento de pertenencia de sus habitantes, y es por ello, que se están llevando a cabo distintas acciones que aseguren su mantenimiento y protección.
Los danzantes son la seña de identidad del pueblo tojeño, nexo de unión de sus vecinos y vecinas, y representa una de las tradiciones más antiguas de Córdoba y Andalucía. Desde el Ayuntamiento se anima a los tojeños a inscribirse en esta Escuela de Danzantes para poder “mantener viva nuestra danza y por ende, nuestras raíces”.