Las obras del Punto Limpio de Luque entran en su fase final
Esta nueva instalación que ocupará una superficie de 2.000 metros cuadrados y tendrá capacidad para tratar 500 toneladas anuales de residuos se encuentra en su fase final de ejecución
El delegado de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Francisco de Paula Algar, ha visitado esta mañana junto a la alcaldesa de Luque y vicepresidenta primera de la Diputación de Córdoba, Felisa Cañete, el estado de ejecución de las obras del Punto Limpio que se está construyendo en el Polígono Industrial San Bartolomé de Luque.
Esta nueva instalación que ocupará una superficie de 2.000 metros cuadrados y tendrá capacidad para tratar 500 toneladas anuales de residuos se encuentra en su fase final de ejecución.
Algar ha agradecido la “predisposición y disposición que siempre ha mostrado el Ayuntamiento de Luque con el parque Natural y el Geoparque Sierras Subbéticas, y la protección y el cuidado por el medio ambiente”.
El delegado ha explicado que la finalización de las obras está prevista para finales del presente mes de mayo. La Junta de Andalucía invertido para la ejecución de este proyecto un total de 221.000 euros, generando además un total de 407 jornales.
Por su parte, Felisa Cañete ha señalado que las obras que comenzaron hace unos meses “se han visto un poco ralentizadas por el tema de las lluvias”. La regidora luqueña ha agradecido “el compromiso de la Junta de Andalucía con Luque” y apuntaba que “muy pronto los luqueños y luqueñas podrán hacer uso de estas magníficas instalaciones”.
Los trabajos que se están llevando a cabo para la puesta en marcha de este punto limpio se centran en la construcción de muros de contención, caseta de control, nave para almacenamiento de residuos especiales e infraestructuras para saneamiento, abastecimiento de agua y suministro eléctrico; así como en tareas de cerramiento y pavimentación. También se le dotará de equipamiento y señalización.
El Punto Limpio de Luque tendrá capacidad para gestionar la recogida de muebles y enseres domésticos, chatarras, escombros y restos de obras, tubos fluorescentes, aceites usados de cocina y automoción, pilas y baterías, material de fotografía y radiografías, restos de poda y jardinería, aparatos eléctricos y electrónicos, baterías de automoción, cartuchos de tinta y tóner de impresoras, residuos líquidos (pinturas, disolventes, barnices, tintes...), vidrios, papel y cartón, envases y ropas y tejidos.