El Cajasur Priego ha cerrado su participación en la Superdivisión masculina con la tercera posición en la temporada 21-22. El conjunto de la Subbética ha vencido por 4-0 en la vuelta del cruce por el tercer puesto al Alzira, un novato que ha firmado una actuación sobresaliente.
De esta forma, el Cajasur cede su cetro al Borges, que en la tarde de ayer se proclamó campeón de Liga tras imponerse en la final a Arteal, que ejerció de verdugo del representativo cordobés en las semifinales. A partir de ahora, el club comenzará un proceso de renovación con la intención de recuperar la senda del triunfo en la máxima categoría del tenis de mesa nacional.
En la cita ante el Alzira, Luis Calvo ha apostado por una tripleta nacional. Machado, ausente en la ida por unos problemas en el hombro, sustituyó a Diogo Carvalho, siendo acompañado por Alejandro Calvo y Carlos Caballero.
El linarense abrió partido ante Guillot y no tuvo opciones. Venció por 3-0, marcador que se repitió en las demás contiendas. Machado se encontró a un Olaya respondón, mientras que Calvo dio cuenta de Martín. Para cerrar la temporada, Caballero echó la persiana del curso en Priego imponiéndose a Olaya.
El Cajasur, desde mañana, comenzará a trazar su futuro de cara a la próxima temporada, en la que intentará recuperar el trono del tenis de mesa español. Porque su gran virtud reside en que acabar en el podio en la Liga y ser finalista de la Copa del Rey no le resulta suficiente.