La Comisión de Patrimonio da luz verde a las obras de conservación en la iglesia de La Asunción de Priego
La actuación se centrará en la conservación y mantenimiento de las cubiertas sobre una superficie de 144 m².
La Comisión de Patrimonio de la Delegación Territorial de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía ha informado favorablemente acerca de las obras de conservación y mantenimiento de la iglesia parroquial de Nuestra Señora de La Asunción de Priego de Córdoba.
En concreto, el proyecto se centra en las cubiertas sobre una superficie de 144 m². Se van a realizar trabajos previos y acotación de las zonas de trabajo, limpieza general de vegetación y restos orgánicos entre las tejas, así como de canalones, inspección visual de los tejados, levantado de las tejas rotas y reposición por otras de forma y composición similar, colocación de las tejas movidas, reparación de encuentros entre cubiertas y paramentos, así como de la zona afectada en su parte interior.
La iglesia parroquial de Nuestra Señora de La Asunción de Priego de Córdoba es un edificio protegido con la tipología de Monumento y declarado Bien de Interés Cultural por la Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía. En el Catálogo de Bienes Protegidos de Priego de Córdoba está incluido con grado de protección integral.
La construcción del templo parroquial de Nuestra Señora de La Anunciación se llevó a cabo en la primera mitad del siglo XVI, a instancias de la marquesa de Priego. Se trata de un edificio gótico-mudéjar de tres naves con arcos apuntados sobre pilares octogonales, terminados por una cubierta mudéjar con decoración que aún se conserva bajo la bóveda barroca del siglo XVIII. La Puerta de Santa Ana, de estilo plateresco, se atribuye a Martín de Bolívar, artista del círculo de Siloé. La reja de la puerta principal es de 1575 y la torre de 1541.
En el siglo XVII se realizaron las capillas laterales, como la del Cristo de los Parrillas, terminada en 1636. La imagen del Cristo es atribuida a Alonso de Mena, fechándose hacia 1635. Destaca el retablo mayor del Renacimiento tardío. Su distribución parte de un banco y tres cuerpos rematados por un ático, divididos de arriba abajo por tres calles y cuatro entrecalles en distinto plano que fue montado en 1567. Su autoría se desconoce, al igual que el imaginero y el lugar de procedencia del mismo. Las pinturas son de Pedro de Raxis y Ginés López.
El templo actual es fruto de la remodelación realizada entre 1743 y 1747, que consistió en ocultar los antiguos artesonados con bóvedas de arista, dotando al conjunto de una cúpula oval delante del presbiterio. Los antiguos arcos góticos quedaron ocultos bajo los de medio punto y la nueva decoración utilizó abundantes yeserías y molduras. El autor de esta obra es Jerónimo Sánchez de Rueda.