Ecologistas en Acción ha recibido con satisfacción la publicación en el BOJA de una Resolución de la Dirección General de Medio Natural, Biodiversidad y Espacios Protegidos de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible (CAGPyDS) por la que se suspende en la temporada 2019-2020 la recogida nocturna de aceituna en olivares superintensivos por posible daño a las aves silvestres.
Aunque en un principio el gobierno PP-Cs mantuvo la misma actitud de pasividad que el anterior gobierno del PSOE ante esta mortandad masiva de aves insectívoras, ha sido más receptiva a las denuncias de los ecologistas y a las advertencias de la Unión Europea.
El impacto en las aves por la recolección nocturna de la aceituna del olivar superintensivo se conocía por la antigua Consejería de Medio Ambiente desde el 2017, cuando gobernaba el PSOE, que debería haber actuado de forma rápida ante los datos de mortalidad que se aportaban en los primeros informes, como solicitó Ecologistas en Acción en el Comité de Fauna y Flora del Consejo de Biodiversidad, así como por el posible impacto que podría tener en la imagen internacional de un sector de tanta importancia económica.
Miles de pequeñas aves insectívoras e, incluso, zorzales que utilizan los setos de olivar para pernoctar caen en la trampa de las máquinas recolectoras de aceitunas, terminando en la torva mezclados con las aceitunas recolectadas. El olivar superintensivo supone aproximadamente el 4% del olivar español y se ha expandido por varias comunidades autónomas, sobre todo en Andalucía, y sigue la expansión.
"El modo en el que se recolecta la aceituna de estos olivares con forma de seto, afecta no solo a las aves sino a cualquier animal de menor peso que repose en las ramas durante la noche, como los invertebrados. Por consiguiente los millones de aves insectívoras de Europa que vienen a esas plantaciones para pasar el otoño e invierno, no solo pueden morir por la acción de las cosechadoras, sino que puede que no lleguen a acumular la grasa suficiente que necesitan para volver a emigrar a sus países de origen, por la falta de insectos. El estudio que actualmente realiza el IFAPA debe contemplar también el impacto sobre los invertebrados", explican desde la organización ecologista.
Ecologistas en Acción quiere llamar la atención sobre la necesidad de que cualquier innovación tecnológica que pueda facilitar el trabajo agrícola, debe ser valorada en su doble vertiente social y ambiental antes de lanzarla al mercado. En estos momentos en el que se está diseñando el futuro de la PAC hay que apostar por una agricultura sostenible que evite la pérdida de biodiversidad de los ecosistemas agrarios.
En esto, la (CAGPyDS), que ostenta actualmente las competencias de medio ambiente y de agricultura en Andalucía, debe plantearse una actuación urgente y eficaz para conseguir dicho objetivo. "No podemos olvidar que los pesticidas, la simplificación del paisaje agrario, la expansión del olivar y el almendro a costa de los cereales, y determinadas labores y sistemas de recolección en fechas u horas inapropiadas, se encuentran entre las principales causas de la pérdida de biodiversidad. El etiquetado de productos ecológicos, de producción cercana, y respetuosos con la biodiversidad es el reto de futuro, de cara al consumidor".