Un agente de la Guardia Civil de Castro del Río ha salvado la vida de un bebé que presentaba signos de asfixia en la localidad de Baena.
Una patrulla de la Benemérita que que se encontraba en el interior del casco urbano de Baena observó sobre las 11,45 horas del pasado miércoles en una calle cómo dos jóvenes, con evidentes signos de nerviosismo, se bajaban de un vehículo con un bebé en las manos al que intentaban hacerlo vomitar.
Rápidamente, los agentes se trasladaron al lugar y observaron que el bebé se encontraba con signos evidentes de asfixia, posiblemente por tener las vías respiratorias obstruidas, dado que tenía mucosidad en nariz y boca.
Uno de los guardias civiles le realizó los primeros auxilios al bebé, optando el agente al ver que no reaccionaba por trasladarlo en brazos urgentemente a un centro médico de Baena. Durante el trayecto y al observar la gravedad del menor, el guardia civil optó por volver a practicarle las maniobras de reanimación, consiguiendo que expulsara lo que le impedía respirar.
Una vez trasladado al Centro de Salud, fue reconocido por personal facultativo que comprobó que el menor no presentaba ningún tipo de lesión. Tanto el personal sanitario como los padres del bebé han agradecido a los guardias civiles su intervención.