La Liga Asobal hace escala en Baena antes de reanudar la competición tras el parón de invierno

Dos grandes clubes del balonmano nacional se dieron cita este martes en el Pabellón Cubierto Juan Carlos I para disputar un encuentro amistoso ante el público baenense. El Ángel Ximénez Avia-Puente Genil, que milita en la Liga Asobal, midió sus fuerzas al ARS Palma del Río, que compite en División de Honor Plata. El público pudo disfrutar de la técnica, las jugadas de equipo y los tiros precisos, que pusieron de manifiesto el gran nivel al que estos equipos compiten.

El partido comenzó bastante igualado, el equipo pontense sorprendió en varias ocasiones con robos a la contra, aunque la falta de acierto y la buena actuación del portero palmeño José María Martín, hicieron que se llegara el descanso con el marcador favorable para el equipo que dirige Víctor Montesinos, con un ajustado 10-11.

Durante la segunda parte las cosas fueron cambiando y el equipo pontano aplicó la ley del más fuerte. Los de Paco Bustos apretaron el acelerador generando más juego en equipo, que además, supieron traducir en acierto. Por su parte, el ARS Palma del Río trató de mantener el tipo, y lo hizo, pero no pudieron evitar durante el segundo tiempo alejarse progresivamente en el marcador. Alejandro Plaza fue el máximo anotador del partido con 5 tantos, que no fueron suficientes para dar la victoria al ARS Palma del Río. El marcador conluyó 27-22 favorable al Ángel Ximénez Avia-Puente Genil.

A pesar de ser un amistoso, la intención de ambos equipos es alcanzar un nivel óptimo de juego de cara a la competición, que se reanuda en febrero, por lo que nadie quiere dejarse una victoria en el camino. No obstante, ambos clubes dieron una lección de juego y profesionalidad que realzó, más si cabe, el caché de la cita.

Al finalizar el encuentro, ambos equipos posaron conjuntamente y con los más pequeños que bajaron desde la grada. También el Delegado de Deportes, Joaquín Morales, intercambió obsequios con ambos clubes y culminó el evento con una foto de familia entre jugadores, público y autoridades, que puso broche final a la cita.