Reconocen la experiencia del hospital Reina Sofía en el implante de dispositivos de corazón artificial
Pálex y su partner Berlin Heart han hecho entrega a la dirección y profesionales del complejo sanitario de un aplaca y una réplica del oso Buddy para distinguir su labor en este campo de la Medicina.
El Hospital Universitario Reina Sofía, uno de los seis centros de España que implanta el corazón artificial denominado Excor en la población infantil, ha recibido el reconocimiento, que avala su experiencia y buenos resultados, por parte de Palex y su partner Berlin Heart, empresas desarrolladoras de este tipo de asistencia ventricular, que habitualmente funcionan como puente al trasplante.
El centro cordobés protagonizó hace un año el implante del dispositivo de asistencia ventricular número 100 a nivel nacional. Hasta la fecha, 22 pacientes pediátricos han estado conectados a un Berlin Heart en Córdoba desde que se usó el primero hace ya 14 años.
La directora gerente del hospital, Valle García, recogió una placa y una réplica de ‘Buddy, el oso Corazón de Berlín, que fueron entregadas por Sergio Falcón, responsable de producto de Palex, Bibiana Armangué, directora de la división de Cirugía Cardiovascular de Pálex, y Sandra Fabing, gerente de ventas de Berlin Heart en Europa. Además, el acto, celebrado hace unos días, contó con la asistencia de profesionales de los distintos servicios implicados en la atención y cuidados de estos pacientes: Cirugía Cardiovascular, Cardiología Pediátrica y de Adultos, Intensivos Pediátricos, Anestesia Infantil, Pediatría y Enfermería de quirófano, entre otros.
El Reina Sofía es el único centro de referencia a nivel regional para trasplante cardiaco infantil. A lo largo de su historia se han llevado cabo 92 trasplantes de corazón en la población pediátrica, entre los que figuran algunos hitos, como el implante del corazón al bebé más pequeño de España, con tan solo 8 días de vida, en 1998. La dirección del hospital agradece esta nueva distinción y reconoce el esfuerzo del equipo humano que lo hace posible.
Funcionamiento
Este corazón artificial es un dispositivo de asistencia ventricular pulsátil, paracorpóreo, que sustituye temporalmente la función de uno o ambos ventrículos en pacientes con insuficiencia cardiaca muy grave.
A través de unas cánulas, implantadas en quirófano bajo cirugía extracorpórea con bypass cardiopulmonar, la sangre es aspirada hacia el exterior donde, el ventrículo artificial, bombea de nuevo la sangre de vuelta al organismo. Este “ventrículo” cuenta con una cámara de sangre y otra de aire, separadas por una triple membrana. La unidad central, de accionamiento neumático, introduce y saca gas alternativamente en la cámara aérea, desplazando la membrana y generando así un movimiento “pulsátil”, que remeda la sístole y diástole cardiacas. Una vez conseguida la estabilización tras la cirugía, los niños que portan el dispositivo se encuentran ingresados, pero pueden tener movilidad por el hospital, en planta, zonas comunes y aula educativa.
Habitualmente, el corazón artificial se utiliza como paso previo a un trasplante cardiaco. Este tipo de asistencia, puente al trasplante, permite mantener al paciente, en buenas condiciones, en lista de espera el tiempo que precise, que puede llegar a ser hasta de meses, dada la escasez de donaciones de órganos en edad infantil. El tiempo medio de conexión de los niños al dispositivo en Córdoba ha sido de 95 días, con un rango que va desde los 4 hasta los 250 días. Los resultados son excelentes y, así, el 66,7 de los niños que se han beneficiado de esta asistencia ventricular en Córdoba sobrevive en la actualidad.
A nivel nacional, Berlin Heart empieza a usarse en la década de los 90 y el Hospital Reina Sofía es de los primeros centros del país en incorporarlo en niños. Los otros hospitales españoles implantadores de este tipo de dispositivo se reparten entre Madrid (Gregorio Marañón y La Paz), Barcelona (Vall d'Hebron), La Coruña (Hospital Universitario A Coruña Juan Canalejo) y Valencia (La Fe). Existen estrechos lazos entre estos hospitales, que celebran reuniones periódicas específicas, donde se comparten experiencias, lo que lleva a mejorar la asistencia a estos pacientes.