Una vez más la campaña de Navidad ha permitido terminar el año superando las cien mil visitas a Rute. Es lo que se desprende del informe de la Oficina Municipal de Turismo. Para elaborarlo se recaban datos durante los doce meses, con especial hincapié en el último trimestre.
Hay dos parámetros que, al complementarse, facilitan una estimación fiable de las visitas reales. Uno es el contador del Belén de Chocolate, “el principal recurso turístico”, como lo define la concejala del área, María Dolores Peláez. El otro es el volumen de personas que pasa por la propia oficina. Cotejando ambos datos se puede concluir que se ha cerrado otro año por encima de las cien mil personas viniendo en algún momento a Rute.
El contador del Belén arroja una cifra más cercana a la realidad. No hay que perder de vista que tan sólo un porcentaje relativamente pequeño de las visitas se acerca a la oficina en busca de información. Sin embargo, ahí se puede tomar mejor nota del perfil de este turismo. De entrada, las algo más de veinte mil personas que pasaron por la oficina en 2019 suponen un incremento de casi el 3% respecto al ejercicio anterior. Ese porcentaje podría ser extensivo al volumen global de visitas.
Además, los datos recabados permiten saber más sobre cómo evoluciona el turismo en Rute. La mayoría de los visitantes (casi el 96%) siguen siendo nacionales. Sólo un 4,2% son foráneos, con predominio de británicos y franceses. Con todo, ya se nota la pujanza del turista procedente de los Países Bajos y del norte de Europa. En cuanto al turismo patrio, Andalucía sigue marcando la pauta, con un 85,02%. Del resto de España, los principales puntos de origen son Madrid, Comunidad Valenciana, Castilla la Mancha y Cataluña.
Un último aspecto que no se puede obviar es la incorporación de otras fechas a lo largo del año. Desde hace tiempo se vienen dando pasos para desestacionalizar la oferta turística de Rute. En este sentido, los días centrales de la Semana Santa ya focalizan el interés de los visitantes, con los alojamientos copados. Además, mayo tiene otros dos focos de atención: las Fiestas de la Virgen de la Cabeza, ya declaradas de Interés Turístico por la Junta, y los patios. Peláez ha confirmado que estos rincones están acogiendo a un nuevo perfil de turista.
Todo esto lleva a la concejala a concluir que el turismo local aún no ha tocado techo, sino que “va a más”. La prueba es que ya hay ocho firmas con el distintivo Sicted. De cara al futuro, la cita más inminente es Fitur. Rute acudirá a Madrid de nuevo bajo el paraguas de la Subbética, con novedades como una proyección en Gran Vía. Además, sigue pendiente la declaración de Municipio Turístico. Peláez apela a la calma. Se han hecho los deberes y sólo quedan algunos flecos burocráticos. Los resultados se notarán a largo plazo, sin dejar por ello de trabajar, “tanto a nivel empresarial como municipal”.