La Junta destina más de 870.000 euros a ayudas para agricultores de la Subbética
Estas subvenciones tienen por objetivo impulsar proyectos empresariales relacionados con el olivar y los productos hortícolas para asegurar el futuro de esta comarca eminentemente agrícola
La delegada del Gobierno, Esther Ruiz, acompañada por el delegado territorial de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Francisco Zurera, ha hecho entrega de resoluciones de ayuda a agricultores de las comarcas de la Subbética, Campiña Sur y Guadajoz, en un acto celebrado en Montilla. En total, la Junta va a destinar 2,4 millones que van a beneficiar a 42 agricultores.
En el caso de la Campiña Sur, la Junta de Andalucía, ha resuelto 17 expedientes con un importe de 1,03 millones que van a impulsar estos proyectos empresariales en esta comarca, fundamentalmente relacionados con el olivar y los productos hortícolas. En concreto sólo Montilla cuenta con 10.340 hectáreas de olivar, otras 2.500 hectáreas de tierra arable y otras 2.000 hectáreas en viñedos. En la Subbética, hay 16 expedientes con una inversión de 876.000 euros. Y en Guadajoz, 9 expedientes con 537.000 euros.
Como ha señalado la delegada en su intervención, “estas ayudas contribuyen a asegurar el futuro para estas comarcas eminentemente agrícola con sectores determinantes como el olivar que necesita de personas comprometidas, cualificadas, y que merecen una oportunidad para poder desarrollar su proyecto empresarial, fuertemente ligado al territorio”.
“De esta manera, contribuimos a fomentar el relevo generacional, para que los más jóvenes vean en el campo una oportunidad, apuesten por el desarrollo socioeconómico de nuestra provincia y puedan quedarse aquí, en su tierra a trabajar en un sector dinámico y emprendedor como es el agrícola en Córdoba”.
La delegada ha comprobado como “en los diferentes territorios hay jóvenes dispuestos a encaminar su futuro laboral ligado al sector agrícola y ganadero, y eso es una muy buena noticia para Córdoba porque así, seguiremos siendo un referente en el sector agroalimentario ligado a la calidad, la innovación y la modernización”.
En la última convocatoria, las recientes resoluciones van a permitir que se instalen un total de 120 jóvenes agricultores (26 mujeres y 94 hombres) que recibirán ayudas por valor de unos 7,23 millones de euros en toda la provincia. Esto supone que cada explotación recibiría una prima media cercana a los 60.000 euros.
Ruiz ha destacado “el esfuerzo de los agricultores y ganaderos por mantener el medio rural. Debemos trabajar conjuntamente administración y sector para adaptarse a las nuevas necesidades y retos del mercado; estar al día en lo que se refiere a la modernización y adaptación a las nuevas tecnologías de las explotaciones, para en definitiva ser más competitivos y asegurar la calidad y la viabilidad de las explotaciones y la sostenibilidad del medio agrícola y ganadero”.
Andalucía es la comunidad autónoma que más fondos destina a fomentar que los jóvenes se comprometan con el campo, al ver en este ámbito una verdadera posibilidad de emprendimiento. Los jóvenes menores de 40 años titulares de explotaciones en Andalucía, no representan el 10% del total, y aunque tenemos una estructura de menor edad que la media nacional, no creemos que sea suficiente.
Por regla general los jóvenes que se instalan en explotaciones agrícolas y ganaderas son más dinámicos, con empresas mejor dimensionadas, más viables, con una mejor cualificación y son más abiertos a innovaciones y a sistemas de producción más sostenibles, como es el caso de la agricultura ecológica.
En este nuevo marco de programación, y concretamente en el Programa de Desarrollo Rural de Andalucía (PDR-A) 2014/2020, se refuerzan aún más las políticas orientadas hacia los jóvenes agricultores y ganaderos, siendo la línea de incorporación a la actividad agraria la medida con mayor visibilidad en el medio agrario.
El objetivo sigue siendo la mejora del capital humano en el complejo agroalimentario y el medio rural, poniendo el acento el relevo generacional porque es una necesidad para la actividad agraria y ganadera, una prioridad para la Junta de Andalucía que apuesta por favorecer la incorporación de jóvenes capacitados profesional y empresarialmente, impulsar la innovación y las nuevas tecnologías para aumentar la rentabilidad de las producciones y conseguir explotaciones mejor dimensionadas, más sostenibles y competitivas; impulsar el empleo agrario asociado a los proyectos beneficiarios de ayuda y mantener la población en el medio rural.