Una oportunidad laboral para mujeres víctimas de violencia de género en la industria del frío de Lucena, un sector en auge entre otras cosas por su papel clave en la logística necesaria para el proceso de vacunación contra la Covid-19.
Eso es lo que persigue Cruz Roja con los dos cursos que, en colaboración con la academia de formación Aprobé de Lucena, ha organizado en este comienzo de año en dicho municipio, uno de frío industrial y otro de soldadura oxibutano.
Dichas formaciones, merced a las cuales las mujeres participantes han adquirido las competencias técnicas exigidas para trabajar en empresas del ramo, se enmarcan dentro del proyecto ‘Acércate’, impulsado por la institución humanitaria y el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) para promover la inserción laboral y la igualdad de oportunidades y de trato de este colectivo.
Con dichos cursos se persigue, además de mejorar la empleabilidad de estas mujeres, romper barreras de género en sectores tradicionalmente masculinizados. “Queremos por supuesto apoyarlas para que encuentren empleo en sectores en auge, como el del frío industrial”, comenta Carmen Cabello, técnica del Plan de Empleo de Cruz Roja, “pero, al mismo tiempo, combatir prejuicios y estereotipos de género que dificultan muchas veces su incorporación laboral”, apostilla.
En algo más de un año, son alrededor de 150 las mujeres víctimas de violencia machista con las que el personal de Cruz Roja ha intervenido a través del ‘Acércate’, cuyo equipo técnico se vio obligado a dar un giro drástico al proyecto para adaptarse a las nuevas circunstancias provocadas por la pandemia. “Entre otras cosas, intensificamos aquellas formaciones en ocupaciones que tienen más demanda en el actual mercado laboral, como limpieza hospitalaria, ayuda a domicilio, operaria de comercio o estos cursos de frío industrial”, añade Cabello.
De forma transversal, se han puesto en marcha talleres de nuevas tecnologías para romper la brecha digital y que mujeres de toda la provincia tengan acceso a las TICs en la búsqueda de empleo, trámites administrativos y acceso a la información.
De este modo, con el proyecto se intenta no solo diseñar un itinerario individualizado de inserción para cada una de las participantes, sino también mejorar sus habilidades personales y profesionales para la búsqueda de empleo.
Así pues, ‘Acércate’ trata de ofrecer una respuesta integral a las mujeres, con un seguimiento personal de cada caso por parte del equipo de profesionales que coordina el programa, quienes se encargan de registrar los avances que van teniendo las participantes y atenderlas ante cualquier necesidad que pueda surgir.
Además del trabajo directo con las víctimas de violencia de género, el proyecto incluye la puesta en marcha de medidas de cooperación empresarial, alianzas dirigidas a reforzar la adquisición de competencias y de sensibilizar a las empresas sobre la importancia y los beneficios de la contratación de mujeres en dificultad.