El Ayuntamiento de Luque ha emitido un bando informativo donde se informa de que está prohibido alimentar a los gatos callejeros. A través de este escrito se importa que se ha comprobado cómo en algunos rincones y cascos del casco antiguo se depositan recipientes con agua y comida para gatos.
Felisa Cañete, alcaldesa de la localidad, asegura a través de este bando que esta mala praxis está haciendo que proliferen colonias descontroladas de estos felinos que, además de ensuciar las calles, pueden trasmitir enfermedades a los seres humanos como la 'taxoplasmosis', la 'enfermedad del arañazo del gato', la 'rabia sarna' o la enfermedad de lyme.
"Al estar alimentados no cumplen su función natural de depredación y, por tanto, aumenta también la población de roedores, que también ponen en peligro las condiciones higiénico-sanitarias del municipio", se explica a través del bando informativo.
Además, se recuerda que según la Ordenanza Municipal sobre Medio Ambiente, de convivencia y civismo, está recogida como infracción grave con multas de entre 750 y 1.500 euros "depositar escombros y toda clase de residuos urbanos" en zonas no autorizadas por el ayuntamiento.
Por ello, el consistorio luqueño ha pedido a la población que se abstenga de poner recipientes de agua y comida para gatos en la vía pública. "En caso contrario nos vemos obligados a aplicar el régimen sancionador establecido en la Ordenanza Municipal", apuntan.