No se puede decir que el Hotel Museo Patria Chica haya vivido una temporada fácil. De hecho, llegó a temer hasta por la permanencia en la Liga Iberdrola. Sin embargo, cuando peor le pintaban las cosas, le salió el gen que sólo puede producir un club ganador como el Real Club Priego.
De ahí que tras confirmarse otra temporada más en la máxima categoría de su deporte (único, por cierto, en la provincia de Córdoba) haya jugado más suelto los partidos que le quedaban de competición y que no eran fáciles. Porque anteayer vencía al Alicante, la sorpresa agradable de la temporada, mientras que la tarde de ayer daba cuenta del campeón de Liga y Copa, el UCAM Cartagena, que también está a un paso de lograr la ETTU Cup.
De hecho, la confirmación del horario del partido fue relámpago con el fin de que el equipo departamental prepare en las mejores condiciones la cita ante el Lille de la Pro A francesa. Con todo, el Hotel Museo Patria Chica ha podido con un rival al que ya tuvo contra las cuerdas en la semifinal de Copa de la Reina.
De salida, el primer punto tuvo una corta historia. María Xiao estaba lesionada y no forzó en su enfrentamiento con Melinda Ciurcui más allá de dos saques. Así que pronto entraron en liza Marija Galonja y Andrea Marín, quien poco pudo hacer ante una balcánica enrachada en el tramo final de competición. Un 0-3 de los rápidos para seguir cociendo lo que sería una despedida por la puerta grande, como dicen los taurinos.
El tercer punto, inicialmente, presentaba un desnivel considerable. Y es que Luis Calvo citó a la infantil Lucía López, quien plantó cara a la jugadora del UCAM en función a la evolución de la contienda. Aunque la eslava fue superior y cerró con el 3-0 esperado.
Nuevamente, el dobles sería determinante para el desenlace del partido y ahí volvieron a rendir a un gran nivel Ciurcui y Galonja para poner el 1-3. De manera contundente, se impusieron a Lebedeva y Marín. Es decir, que quedaban tres opciones para tumbar al campeón.
Y en esta ocasión sucedió, aunque fue de la peor de las maneras. Y es que el sorteo deparaba un encuentro entre Galonja con Xiao, quien no podía jugar por esa lesión. Eso sí, el triunfo sobre el campeón es una forma dulce de acabar el curso en una Liga Iberdrola que ha tenido un coste carísimo por el alto nivel de sus equipos. Y lo mejor es que el próximo curso seguirá teniendo a un equipo de Priego de Córdoba. El único femenino de máxima categoría.