Priego inaugura un espacio expositivo dedicado al Pendón de Zamorano tras finalizar su restauración
Este estandarte ha sido incorporado al Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz y actualmente se encuentra en proceso de ser declarado Bien de Interés Cultural.
En Priego de Córdoba se ha inaugurado el espacio expositivo dedicado al Pendón de Zamorano, una de las piezas más destacadas del patrimonio histórico a nivel municipal. El acto ha contado con la presencia de numerosas autoridades y representantes, entre ellos Juan Ramón Valdivia, alcalde de Priego de Córdoba; Juan José Primo Jurado, director del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH); Jezabel Ramírez Soriano, concejala de Cultura; y Rafa Carmona, director del Museo Arqueológico Municipal.
Durante su intervención, Jezabel Ramírez Soriano, presidenta del área de Cultura del Ayuntamiento de Priego, agradeció la colaboración entre instituciones y destacó la importancia de este día para la localidad. “El Pendón de Zamorano es una de nuestras insignias bélicas más destacadas y, tras su restauración, hemos podido descubrir nuevos detalles que enriquecen su valor histórico y artístico”, afirmó. Ramírez también subrayó el papel de la familia Tisner Madrid en este proceso, quienes custodiaron esta pieza durante más de cinco siglos, así como la labor técnica del IAPH, que lideró los trabajos de restauración.
El espacio expositivo, ubicado provisionalmente en el vestíbulo del Ayuntamiento, permitirá la contemplación de este bien histórico mientras se avanza en el proyecto del nuevo Museo Arqueológico Municipal. Además, se anunció que el Pendón será protagonista en las próximas Jornadas de Patrimonio Histórico Local, previstas para los días 28, 29 y 30 de enero, donde se abordará en profundidad su historia y contexto a través de diversas conferencias.
Rafa Carmona, director del Museo Arqueológico Municipal, ofreció un detallado repaso histórico sobre el pendón, cuya antigüedad se remonta a 1501, y rememoró cómo hace más de 20 años, se inició el proceso de recuperación y catalogación del Pendón de Zamorano, un bien que hasta entonces permanecía prácticamente desconocido.“Nos encontramos ante una pieza extraordinaria que data de 1501, vinculada estrechamente al contexto de la guerra de Granada y al final de la Edad Media. Su función militar se mantuvo activa hasta principios del siglo XIX, lo que refuerza su singularidad como testimonio histórico”, explicó Carmona.
El arqueólogo comentó que el pendón puede admirarse por ambas caras y destacó el valor iconográfico del Pendón, aunque reconoció que ciertos elementos pueden generar debate en la actualidad, subrayó que el análisis histórico global permite apreciar su relevancia y riqueza como documento del pasado.
Por su parte, Juan José Primo Jurado, director del IAPH, señaló que este proyecto no solo ha permitido preservar un bien de incalculable valor histórico, sino también fomentar el conocimiento sobre el contexto en el que fue creado. “La restauración del Pendón de Zamorano nos recuerda la importancia de conservar nuestro patrimonio como legado para futuras generaciones”, expresó.
El Pendón de Zamorano, considerado uno de los bienes muebles prieguenses de mayor valor histórico, es una pieza coetánea al tránsito de la Edad Media a la Moderna, que se conservaba en el domicilio de la familia Madrid. Este estandarte ha sido incorporado al Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz y actualmente se encuentra en proceso de ser declarado Bien de Interés Cultural.
El alcalde de Priego de Córdoba, Juan Ramón Valdivia, destacó el esfuerzo conjunto del Ayuntamiento, el IAPH y la familia Tisnes Madrid, para garantizar la conservación y difusión de este legado. “Este pendón es un símbolo de nuestra historia y nuestra identidad, y la responsabilidad de protegerlo trasciende generaciones. Desde el Ayuntamiento, seguimos trabajando para que piezas como esta, que forman parte de nuestra esencia, sean accesibles para toda la ciudadanía y se conviertan en un puente hacia nuestro pasado”, afirmó Valdivia. La inauguración culminó con un recorrido por el espacio expositivo, donde los asistentes pudieron admirar de cerca los detalles de esta pieza única.