Asaja, COAG y UGT firman las tablas salariales del convenio del campo en la provincia para 2022
Las organizaciones agrarias Asaja y COAG en Córdoba, con sus responsables al frente, Ignacio Fernández de Mesa y Carmen Quintero Morales, respectivamente, y el sindicato UGT Córdoba, representado por Pedro Téllez y como sindicato mayoritario en el sector agrario, han firmado las tablas salariales del convenio del campo de la provincia de Córdoba para el año 2022.
Según han informado las organizaciones agrarias y el sindicato en un comunicado conjunto, se trata de un acuerdo que incluye el incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) aplicado en las tablas salariales, tanto para los trabajadores fijos y fijos discontinuos, como para los trabajadores eventuales del sector.
El convenio colectivo vigente 2021-2023, recoge en su artículo 27 que para los años 2022 y 2023 el incremento del SMI será el que Gobierno apruebe en esta materia. Por ello, la comisión paritaria del convenio colectivo del campo ha actualizado las tablas salariales con una subida del 3,63 por ciento, quedando fijado el SMI por jornada de trabajo en 50,73 euros.
Además, los firmantes han acordado una reunión de dicha comisión en el próximo mes de junio, para abordar y adaptar el convenio colectivo del sector en la provincia al Real Decreto Ley 32/2021, por ejemplo, en materia de contratación laboral.
Para UGT FICA, la aplicación del SMI en la provincia de Córdoba afectará, aproximadamente, a unos 65.000 trabajadores agrarios, de los cuales, gracias a la Reforma Laboral aprobada por el Gobierno y los agentes sociales y económicos, ya se han convertido en fijos alrededor de 1.000 contratos. Además, en lo que va de año se han realizado unos 5.000 contratos en la categoría de fijo-discontinuo en el sector agrario de la provincia de Córdoba.
El incremento del precio mínimo de la jornada de trabajo y la mayor estabilización en la contratación, junto con las futuras mejoras en el convenio colectivo, deben servir para ir modernizando y dignificando el trabajo en el campo, al mismo tiempo que hacerlo más atractivo, para que los jóvenes puedan optar a este trabajo con unas mínimas condiciones. Todo ello, sin olvidar la importancia de este sector para el asentamiento de la población rural.