El pasado día 29 de agosto, sobre las 8:30 horas de la mañana, Fuerzas del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Córdoba, procedieron a la investigación de un varón de 42 años de edad, como presunto autor de varios delitos contra la Seguridad Vial, por conducir un vehículo bajo la influencia de las drogas y de bebidas alcohólicas, haciendo caso omiso a la señal de alto de los agentes de la autoridad cuando se encontraban éstos realizando verificaciones de alcohol y drogas en el km 7,500 de la carretera CO-3404 (Córdoba-Trassierra).
El conductor se dio a la fuga a gran velocidad, y efectuando adelantamientos a diversos vehículos en tramos curvos, señalizados con línea longitudinal continua y señales de prohibición de adelantamiento, poniendo en grave peligro tanto a los ocupantes de los vehículos adelantados como a los que circulaban en sentido contrario, teniendo uno de los conductores que frenar bruscamente y apartarse a su derecha para evitar la colisión frontal, como así testificó a la Guardia Civil con posterioridad.
Acto seguido, otra patrulla de la Guardia Civil de Tráfico montó un dispositivo en esta carretera para detener al vehículo infractor, a lo que al verlo, el infractor detuvo bruscamente su vehículo a la altura del km 1,500 de esta carretera, emprendiendo una huida a pie por campo a través, siendo esta persona detenida por los agentes tras una rápida persecución de 300 metros corriendo tras de ella.
Se da la circunstancia de que esta carretera aunque es una vía local, es muy frecuentada por los cordobeses que cuentan con una segunda residencia veraniega en los pueblos de la sierra, estando a esas horas fuertemente frecuentada por muchos usuarios que suben o bajan a Córdoba, constituyendo esta ilegal actuación del conductor detenido un gravísimo peligro para todos los usuarios de esta vía pública.
Tras realizarle al investigado la preceptiva prueba de alcohol y drogas, dicho conductor arrojó un resultado positivo de 0,58 mg/l de alcohol en aire espirado y se está analizando las pruebas remitidas para la detección de drogas.
El investigado se enfrenta a una posible pena de prisión de seis meses a dos años, y privación del permiso de conducción de uno a seis años, por el delito de conducción temeraria, y de prisión de tres a seis meses, o multa de seis a doce meses, o con la de trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventas días, y en cualquier caso con la de privación del permiso de conducción por tiempo superior a uno y hasta cuatro años por el delito de conducción bajo la influencia de drogas y bebidas alcohólicas.
Igualmente fue denunciado por conducir un vehículo a motor teniendo el permiso de conducción caducado y por carecer de la inspección técnica periódica el vehículo que conducía.