La Guardia Civil tuvo conocimiento a través de un aviso recibido de una vecina de Montilla, que informaba de que había localizado a uno de sus gatos, que llevaba desaparecido dos días, en el interior de una finca a la cual no podía acceder y que dicho animal se encontraba inmóvil, pero vivo, dado que no paraba de maullar.
Ante ello, la patrulla que se encontraba de servicio de Seguridad Ciudadana por las inmediaciones de la localidad se trasladó al lugar indicado y tras acceder al interior de la finca, focalizó el animal atrapado en una trampa-lazo formada por un cable de metal multifilamento, que le tenía presionado el cuello de tal manera que lo estaba estrangulando cada vez que intentaba moverse.
Debido a la gran presión ejercida por el cable, así como por el estado que presentaba el animal, resulto imposible quitarle el cable del cuello a animal, por lo que los Guardias Civiles procedieron a cortar el lazo trampa de la cuerda de rafia que lo sostenía, y trasladar al animal a una clínica veterinaria donde, con el material y tratamientos adecuados, consiguieron quitarle el cable que presionaba el cuello y con ello se consiguió salvar la vida del animal.
Ante ello, se procedió a la investigación del titular de la finca como supuesto autor dos delitos de maltrato de animal, uno de ellos por los hechos narrados y el otro tras observar que otro gato había sido atrapado por otro lado, teniendo que amputarle una extremidad a dicho animal.
Esta no es la única actuación que ha realizado el puesto de Montilla en relación con el maltrato animal en los últimos meses, ya que el pasado 19 de septiembre fue investigado otro vecino de la localidad, en relación con un posible envenenamiento de gatos en la localidad.