La asociación de Producción y Consumo Subbética Ecológica recibió el pasado martes al presidente de la Mancomunidad de la Subbética y alcalde de Iznájar, Lope Ruiz, y al presidente del Grupo de Desarrollo y alcalde de Lucena, Juan Pérez, en una visita oficial en la que conocieron el trabajo y las instalaciones del colectivo.
Tras la visita se celebró una reunión de trabajo con representantes de las tres entidades para profundizar en la implementación del convenio que la Mancomunidad y Subbética Ecológica firmaron el pasado mayo.
De forma global, dicho acuerdo, promueve la colaboración mutua para la promoción y fomento de la producción y consumo ecológicos en la comarca y, de manera más particular, el apoyo de la Mancomunidad en el desarrollo del futuro Obrador Ecológico de la Subbética, un obrador compartido en el que la asociación comenzará a procesar y transformar alimentos de sus familias productoras.
Según indicó Subbética Ecológica en su comunicado, la reunión fue “muy satisfactoria, ya que se encontraron puntos comunes de desarrollo de estrategias y una actitud colaborativa” de todas las partes para comenzar un trabajo conjunto.
Asimismo, se estableció la Comisión de Seguimiento que trabajará en el desarrollo del convenio y que se reunirá periódicamente para dar continuidad a la colaboración.
Gracias al apoyo de la Fundación Daniel y Nina Carasso, una entidad franco-española, Subbética Ecológica está comenzando las labores para implantar un obrador colectivo o conservera en su sede en Cabra, el EcoCentro, donde pondrá en valor los productos excedentes de sus familias socias con elaborados y transformados y realizará acciones formativas y dinamizadoras relacionadas con la gastronomía y la agroecología.
El apoyo de la Fundación Carasso al proyecto del Obrador Ecológico de la Subbética vino tras ser uno de los siete seleccionados de entre 23 iniciativas de todo el país lo que le permite a Subbética Ecológica la ayuda económica de la Fundación durante un periodo de dos años.
“Desde el primer momento, el Obrador nace con una vocación comarcal, de apoyo al desarrollo del territorio, y por ello la participación y el compromiso de la Mancomunidad y de las entidades comarcales es estupendo”, explica la nota al añadir que el nuevo proyecto “contribuirá al bienestar de nuestra comunidad creando empleo, fortaleciendo la economía de las pequeñas familias productoras y ofreciendo además un lugar de intercambio socio-gastronómico y turístico”.
