El Cajasur Priego está cerca de obtener el doblete en la presente temporada. En la Copa del Rey ha conseguido el pase a la final después de dejar en el camino a equipos como el Atlético San Sebastián, el Arteal, el Alzira o el Visit Pontevedra, al que ha vencido en la ronda de semifinales por 3-0.
Pero este miércoles le queda el gran escollo: el Borges. Su particular clásico, que hace tan sólo tres días le discutió una apasionante semifinal del play off de la Liga y que en 2018 le vendió su piel a precio de oro para que el Cajasur Priego pudiera levantar su sexta Copa en Antequera. El destino, siempre caprichoso, los vuelve a emplazar en el mismo escenario. La cita será a las 11:30 horas y podrá seguirse por Teledeporte y RFETM.TV.
En sí, la gran eliminatoria para el Cajasur antes de la semifinal fue el partido de la fase de grupos ante el Arteal. A primera hora se definía el que iba por la parte “amable” del cuadro y el que podría caer emparejado con el Borges. Por eso, el Cajasur no especuló y ganó con un brillante 3-1 a los gallegos. Eso les dio pie a jugar los cuartos de final contra el Alzira, recién ascendido a la Superdivisión. Los prieguenses no dieron opción y vencieron por 3-0, sabiendo que en semifinales se emparejarían con el vencedor del Pontevedra-Leka Enea.
Los del Monte Porreiro ganaron y se convertían en el penúltimo obstáculo para intentar revalidar la Copa obtenida la temporada anterior en Armilla. Diogo Carvalho ratificó su gran momento ante Galvano. Sacó adelante el primer partido ante el siempre complicado argentino, que le puso en aprietos durante la segunda manga. Era una forma de marcar territorio y limitar las esperanzas que pudieran tener los jugadores de la escuadra gallega.
El segundo partido presentaba Kosiba contra un viejo conocido de la parroquia prieguense como André Silva. Y se podría decir que fue el partido más duro de toda la contienda. El jugador del Pontevedra llevó al límite al magiar, pero éste echó mano de sus galones para recuperar ciertas situaciones límite en el marcador, con puntos de set en contra. El 3-0 final, sin duda, fue muy trabajado.
Para cerrar el partido entró Carlos Machado contra Martín Betancor. El prieguense, jugando de tres, quería afinar las sensaciones de cara a la final de mañana. Y las recobró de la mejor manera, sacando un amplio repertorio de golpes ofensivos y defensivos, si la ocasión lo requería. No le resultó fácil a Machado, ya que perdió en la segunda manga. Sin embargo, el número 1 de España volvió a su juego sólido y cerró una victoria que puede ser el paso previo de la octava Copa del Rey.