A primera vista, un triunfo por 0-4 puede representar solvencia y claridad. Sin embargo, no siempre los encuentros son así en tenis de mesa, puesto que se pueden dar casos que para alcanzar la victoria hay que sudar cada punto y eso es lo que le ha sucedido esta tarde al Cajasur en la pista del Sanse.
El representativo de la Subbética ha ganado y con ese éxito parcial recupera el liderato de la Superdivisión, que no se ajustará hasta que el próximo miércoles se mida al Arteal en un encuentro aplazado con motivo de la participación en la Copa de Europa. Sin embargo, se lo han puesto realmente complicado hasta el punto de que dos de sus puntos necesitaron de una quinta manga.
Para empezar, Daniel Kosiba se enfrentaba a Denis Terna, que salió respondón. Porque dejó en un 3 al magiar como réplica a la primera manga conquistada. Después, no sin aprietos, el húngaro del Cajasur ganó dos parciales más y estableció el 0-1.
Después Fedotov y Machado ofrecieron uno de esos encuentros largos y con múltiples alternativas en el marcador. Como casi siempre, Machado terminó por imponer su calidad y experiencia ante el jugador ruso. Con apuros, pero un 0-2 que debía dar maniobrabilidad a Alejandro Calvo.
El prieguense, en su partido, se midió a Rafael Casares. Y su arranque hacía presagiar que no quería complicarse en exceso. Ganó con holgura las dos primeras mangas. Casares quiso reaccionar y se adjudicó el tercero, pero poco más. Porque Alejandro Calvo puso el 0-3. Como en otras ocasiones, el casillero de puntos ya tenía un pequeño botín.
Pero se podía mucho más y el Cajasur no lo perdonó. Pero con exigencias. Porque Terna se puso dos veces por delante de Machado. Y eso hirió al número 1, que no hizo concesiones. Arrasó en las dos últimas mangas para llevarse su pleito y el partido. Ahora, ya toca pensar en el Arteal en uno de esos encuentros que pueden empezar a valer una Liga. Otra.