La Unidad especializada en ciberdelincuencia “Equipo @” de la Guardia Civil de Córdoba ha desarrollado la denominada “Operación RIBELO” relacionada con delitos de estafa, mediante el método Phising-Vishing, donde se han esclarecido un total de once delitos de estafa.
La operación se inició a principios del año 2022, cuando a través de diversas gestiones de investigación realizadas por Agentes del Equipo @, encargados del asesoramiento, prevención y respuesta en materia de ciberdelincuencia de la Comandancia de Córdoba, descubrieron que existían elementos comunes en la comisión de estafas, como eran el mismo modus operandi y mismos recursos utilizados para la comisión de hechos delictivos. Existían diversas denuncias recogidas en diferentes puestos de la provincia.
A partir de ese momento se inició la Operación “RIBELO”, con la finalidad de esclarecer los hechos e identificar a los responsables de las estafas.
El modus operandi empleado por los autores era el método Phising-Vishing, consistente en que los ciberdelincuentes se hacían pasar por entidades bancarias mediante envío de SMS o llamadas telefónicas, alertando de una falsa actividad en sus cuentas bancarias, produciendo así el engaño sobre las víctimas, para que posteriormente a través de enlaces fraudulentos los perjudicados facilitasen sus claves bancarias. Una vez obtenidas las credenciales de acceso online, los ciberdelincuentes realizaban el traspaso de divisas a un neobanco tecnológico de internet con sede en Reino Unido, incluyendo el intercambio por criptomonedas, dificultando así la labor policial.
Durante la fase de investigación por parte de los componentes del Equipo @, se recopiló y analizó toda la información relacionada con estas transferencias, teniendo conocimiento de que existían un total de 11 personas de la provincia de Córdoba afectadas por este mismo hecho delictivo, siendo la cantidad estafada de 19.000 euros.
En el desarrollo de la operación, se han investigado todos los recursos tecnológicos utilizados por los autores de los hechos, entre ellos cuentas bancarias online, líneas de teléfonos móvil y conexiones de Dirección IP, realizándose multitud de colaboraciones con solicitud de información con entidades privadas.
Desarrollada la Operación “Ribelo” durante un prolongado periodo de tiempo, se logra finalmente la identificación e investigación de 13 personas de origen español y 2 extranjeros, siendo puestos a disposición judicial como supuestos autores de once delitos de estafa cometidos con el empleo de nuevas tecnologías.
