Se han destinado un total de 50.000 euros para subvencionar estas iniciativas

La Diputación concede ayudas a 17 proyectos sobre recuperación de la memoria histórica

Las subvenciones se podían destinar a estudios sobre fuentes arqueológicas y documentales, a la recogida de testimonios orales o la confección de materiales didácticos que divulgasen la Memoria Histórica

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La Comisión de Valoración de la Delegación de Cultura ha resuelto conceder a 17 proyectos de colectivos y asociaciones de la provincia los 50.000 euros de la convocatoria pública de ayudas para la recuperación de la memoria histórica y democrática.

Para el delegado de Memoria Democrática de la Diputación de Córdoba, Ramón Hernández, “esta convocatoria es importante porque es fundamental la recuperación de la memoria y el desarrollo de proyectos que trabajen para este fin; también para dar a conocer una parte de la historia que nunca ha sido contada o de la que se desconocen datos”.

Hernández señala que “con la creación de esta Delegación hemos dado un paso importante para trabajar en la recuperación de memoria histórica y para conocer la lucha de los represaliados y víctimas de la dictadura”. Además, continúa el diputado provincial, “ampliaremos la convocatoria y las actividades en este ámbito”.

Entre los colectivos subvencionados están la Asociación Los Pedroches por la República, para las actividades organizadas con motivo de la Primavera Republicana en la comarca; el Foro Memoria Democrática de La Carlota, para la realización de material audiovisual; la Asociación Juvenil Contracultura, para la puesta en marcha de una biblioteca de la memoria histórica de la provincia; y Baena Solidaria, para exposiciones y charlas sobre los exiliados y represaliados en Baena durante la Guerra Civil española.

Además, entre los proyectos subvencionados a título individual hay materiales audiovisuales como 'Los campos de concentración', de Sabino Antolí Cabrera, o 'Las voces de la memoria', de Concepción Avilés.

Tal y como recogían las bases, las subvenciones se podían destinar a estudios sobre fuentes arqueológicas y documentales, a la recogida de testimonios orales, a la confección de materiales didácticos que divulgasen la Memoria Histórica, a la puesta en valor de puntos geográficos vinculados a la misma, a publicaciones y a la organización de actividades intelectuales como congresos, jornadas o cursos.