La catedrática de Derecho Juana María Gil y la socióloga Carmen Ruiz impartieron ayer en la Casa de la Cultura los dos primeros módulos de Educar en igualdad para prevenir la violencia de género, una iniciativa de la Delegación de Igualdad y Mujer del Ayuntamiento de Baena incluida en el Pacto de Estado contra la Violencia de Género para formar al profesorado de la ciudad en coeducación y prevención de la violencia machista. Cerca de 50 personas se han inscrito a estos talleres que se celebrarán en dos jornadas más.
La catedrática de Filosofía del Derecho de la Universidad de Granada aseguró que “Baena es un referente” en la lucha por la igualdad entre mujeres y hombres antes de exponer las nociones básicas del marco legislativo actual: “no hay mayor desprevención que no saber cuáles han sido los esfuerzos legislativos aprobados porque cuando una no conoce qué derecho ha adquirido no lo puede reivindicar”.
Gil, que fue distinguida por el Consistorio baenense el 8 de marzo, explicó que en la actualidad “asistimos a mucha confusión sobre qué es violencia de género y violencia doméstica”, de ahí que expusiera la importancia de tener una “base para entender la subordinación estructural que padecemos las mujeres”.
De la misma forma, Carmen Ruiz también destacó la necesidad de la “prevención mediante” la organización de actividades formativas en institutos y colegios. La experta en prevención de violencia de género entre adolescentes hizo un análisis de las causas y las consecuencias de las relaciones desigualitarias en la adolescencia. “Hay que enfocar mucho desde la escuela”, insistió Ruiz.
El alcalde, Jesús Rojano, recordó que el Ayuntamiento de Baena ha venido trabajando durante los últimos años con los centros educativos a través del certamen de cuentos escolares Ponte las gafas de la igualdad y el concurso de cortos contra la violencia de género, reconocido con el Premio Meridiana.
Rojano explicó que los fondos del Pacto de Estado –20.000 euros en el caso de Baena– ayudan a “intensificar” el trabajo de formación a través de los profesores para que puedan participar en estos talleres y fomentar las relaciones de igualdad entre el alumnado y así “detectar casos de violencia, supremacía y cultura machista dentro de nuestros adolescentes”.
