‘Érase una vez… Torreparedones’. Así se titula el cuento infantil dirigido a niñas y niños de primer y segundo ciclo de Primaria que ha editado la Safa dentro de su proyecto educativo Vivir y sentir el patrimonio. Su autora es la profesora Lydia Pérez y para hacer más amena la lectura cuenta con las ilustraciones del también profesor Ramón Torres.
El director del centro, Ramón Martín, lo ha descrito como un “cuento sencillo y bonito” que se distribuirá entre todos los centros educativos de la ciudad para “acercar a los chavales el conocimiento de Torreparedones”. El alcalde, Jesús Rojano, ha destacado la importancia de esta publicación porque “permitirá que a los niños les suene Torreparedones desde pequeños” y así se vayan identificando con el patrimonio y “lo sientan como propio”.
Rojano ha recordado que con los cuadernos didácticos y los libros científicos ya se han editado publicaciones para que todo el mundo pueda conocer la antigua ciudad, una “apuesta muy significativa del Ayuntamiento y de la sociedad baenense” que ya se ha convertido en una “referencia a nivel internacional”.
En los mismos términos se ha expresado Lydia Pérez, quien ha asegurado que “no somos conscientes del yacimiento que tenemos, uno de los más importantes del mundo”. La profesora, ganadora de varios premios de narrativa, ha referido que con cada visita a Torreparedones “se descubren nuevos detalles” y ha explicado que el propósito del cuento es conseguir que los escolares perciban los restos como antiguos edificios.
Ramón Torres ha detallado la “estética infantil” del libro y la técnica de los dibujos, elaborados con ceras, lápices de colores y bolígrafos. Torres ha mostrado su “entusiasmo” por su “función didáctica” y por su “utilidad a nivel literario y artístico”.
Gracias al proyecto Vivir y sentir el patrimonio, del Departamento de Humanidades y Ciencias Sociales que coordina el profesor Manuel Cortés, ya se han diseñado varios recortables y maquetas del Parque Arqueológico de Torreparedones. Ahora trabajan en un recortable del edificio de la basílica y un arqueódromo para el centro.
