El Sindicato de Enfermería, SATSE, ha reclamado que todas las comunidades autónomas, sin excepción, aceleren la campaña de vacunación del COVID-19 y se administren las dosis correspondientes todos los días de la semana, incluidos festivos, para lograr el objetivo de que el 80 por ciento de la población de nuestro país esté inmunizada en julio de este año.
Tras constatarse un retraso en la campaña de vacunación durante sus primeros días, SATSE subraya que no es en modo alguno aceptable que haya distintas velocidades en su administración en función de la comunidad autónoma, insistiendo en que debe haber una actuación eficaz, rápida y homogénea en el conjunto del Estado.
Para ello, la organización sindical demanda que las diferentes consejerías de Sanidad planifiquen sus respectivas campañas de tal manera que se pueda administrar la vacuna durante todos los días de la semana, incluidos festivos, tanto en las mañanas y tardes como las noches, propiciando que haya suficientes enfermeras y enfermeros para llevarla a cabo con todas las garantías. De igual manera, considera necesario habilitar espacios en las áreas de consultas de los centros hospitalarios para poder también en ellos administrar la vacuna de cara a agilizar aún más la campaña.
Asimismo, y de manera complementaria a la vacunación que debe hacerse en los centros sanitarios, SATSE demanda la creación en todas las comunidades autónomas de equipos móviles para desplazarse a los centros sociosanitarios, y en un futuro a las grandes empresas, compuestos por tres enfermeras y enfermeros, caso, por ejemplo, de lo que ya se está haciendo en Andalucía, para que uno de los profesionales se encargue de la recepción de la vacuna y el oportuno registro de los datos necesarios, así como de la parte administrativa del proceso, otro de la preparación de la dosis en base a los criterios establecidos y el tercero a su administración entre la ciudadanía.
El Sindicato pide que se contrate a todas las enfermeras y enfermeros necesarios para garantizar que se acomete con éxito la campaña de vacunación, apuntando que en el caso de que a una administración se le agoten todas las posibilidades de contratación de nuevos profesionales, se proponga esa labor con carácter voluntario a la plantilla existente recibiendo el reconocimiento económico correspondiente al sobreesfuerzo realizado.
El Sindicato de Enfermería recuerda que el Ministerio de Sanidad es el competente de la provisión y suministro de las vacunas a las comunidades autónomas y son éstas las que deben encargarse de su correcta administración a la población, por lo que la lentitud en el desarrollo de la campaña, llevando solo en torno al 25 por ciento de administración de la vacunas suministradas, es achacable a los gobiernos autonómicos correspondientes.
En este sentido, SATSE reitera que el retraso en el inicio de la campaña de vacunación, especialmente en comunidades autónomas, como Madrid, se debe a la falta de planificación necesaria en materia de profesionales y en una incapacidad de gestión por parte de las administraciones sanitarias competentes. Por el contrario, valora el esfuerzo realizado en autonomías, como Asturias, cuyo porcentaje de vacunación es muy superior al de otras.
De otro lado, el Sindicato rechaza que se destinen recursos públicos a la sanidad privada para realizar la campaña de vacunación. Algo que está haciendo la Comunidad de Madrid y que constata que la presidenta autonómica, Isabel Díaz Ayuso, elude su propia responsabilidad pidiendo ayuda a la empresa privada a costa del dinero de todos los ciudadanos.
SATSE remarca que todo el peso del proceso de vacunación recae en las enfermeras y enfermeros, al encargase de la planificación, recepción, administración y seguimiento de las dos dosis de la vacuna de la COVID-19. Una actuación asistencial que deben realizar, además, al mismo tiempo que desarrollan otras actividades, como la detección y seguimiento de casos de personas con la enfermedad o sospechosa de tenerla, así como su trabajo habitual de atención y cuidados a otras personas con diferentes problemas de salud o en materia de prevención y promoción de la salud, añade.
El Sindicato de Enfermería asegura que llegar al 80 por ciento de la población vacunada en julio de este año debe ser el objetivo prioritario para todas las administraciones sanitarias competentes, de ahí que insista en reclamar a todas ellas los recursos humanos y materiales suficientes.
Por último, el Sindicato hace un llamamiento al conjunto de la población para que no rechace la posibilidad de vacunarse una vez constatada su eficacia por parte de los expertos y organismos competentes. “Entre todos y todas vamos a lograr acabar con esta grave enfermedad y, para ello, la vacunación resulta primordial”, concluye.