Las bujías de coche son necesarias para encender la mezcla de aire y combustible en la cámara de combustión de un motor de combustión interna. La chispa de la bujía proporciona la energía necesaria para encender el combustible, que a su vez acciona el motor. Sin bujías que funcionen, el motor no arrancaría ni funcionaría correctamente.
Hay varios tipos de bujías para un coche, y las más comunes son:
De cobre: Las bujías de cobre son las más económicas y adecuadas para un uso regular. Están hechas de núcleos de cobre niquelados o cincados. Tienen buena conductividad y disipación del calor, pero su vida útil es más corta que la de otros tipos de bujías.
De platino: Las bujías de platino tienen un disco de platino soldado al electrodo central que tiene una vida útil más larga en comparación con las bujías de cobre. Son más duraderas y tienen mayor resistencia al desgaste, pero también son más caras.
Iridio: Las bujías de iridio tienen un electrodo central de iridio que es aún más pequeño y duradero que el de platino. Tienen la vida útil más larga de todos los tipos de bujías, pero también son las más caras.
Doble platino: Las bujías de doble platino tienen un disco de platino soldado tanto al electrodo central como al electrodo de masa. Son más duraderas y resisten mejor el desgaste que las bujías de platino simple.
Doble Iridio: Las bujías de iridio doble tienen un electrodo central de iridio aún más pequeño y duradero que el de platino. Tienen la vida útil más larga de todos los tipos de bujías, pero también son las más caras.
Siempre se recomienda consultar el manual del propietario o a un mecánico cualificado para obtener recomendaciones específicas para su vehículo y para saber cuál es el tipo de bujía que mejor se adapta a su marca y modelo.
A la hora de elegir bujías para tu coche, debes tener en cuenta algunos aspectos:
Compatibilidad: Asegúrese de que las bujías están diseñadas para adaptarse a su marca y modelo de coche.
Rango térmico: El rango térmico de una bujía se refiere a su capacidad para disipar el calor de la cámara de combustión. Es importante elegir el rango térmico adecuado para tu motor para evitar sobrecalentamientos o daños en el motor.
Material: Las bujías están disponibles en distintos materiales, como cobre, platino e iridio. Las bujías de cobre son las más económicas y adecuadas para un uso regular. Las bujías de platino e iridio son más caras, pero tienen una vida útil más larga y son más eficientes.
Separación: La separación de una bujía es la distancia entre el electrodo central y el electrodo de masa. Es importante elegir una bujía con la separación correcta para su motor a fin de garantizar una combustión adecuada.
Marca: Hay varios fabricantes de bujías muy conocidos, como NGK, Bosch, Denso, Champion, etc.
Siempre se recomienda consultar el manual del propietario o a un mecánico cualificado para obtener recomendaciones específicas para su vehículo.
La frecuencia con la que debe cambiar las bujías depende de varios factores, como el tipo de vehículo que tenga, el tipo de bujías que utilice y sus hábitos de conducción.
Por lo general, la mayoría de los fabricantes recomiendan cambiar las bujías cada 30.000 a 100.000 millas. Sin embargo, si conduces en condiciones severas, como tráfico intenso en ciudad, clima caluroso o viajes cortos frecuentes, puede que necesites cambiar las bujías con más frecuencia.
Siempre se recomienda consultar el manual del propietario o a un mecánico cualificado para obtener recomendaciones específicas para su vehículo y ellos podrán aconsejarle sobre la frecuencia con la que debe cambiar las bujías en función de sus condiciones de conducción individuales.
La inspección periódica de las bujías también puede ayudarle a identificar posibles problemas a tiempo y evitar daños en el motor.
El cambio de bujías de su coche puede variar en función de la marca y el modelo de su vehículo, pero el proceso general es el siguiente:
Localice las bujías: Consulte el manual del propietario del vehículo o un manual de reparación para encontrar la ubicación de las bujías. Normalmente se encuentran en el compartimento del motor.
Reúna las herramientas: Necesitarás un vaso para bujías (un vaso especial diseñado para encajar en la bujía), una carraca y una galga.
Retire el cable de la bujía: Con la carraca, retira el cable de la bujía tirando de la funda (la parte de goma o plástico) y no del cable.
Retire la bujía: Con la llave de bujía y el trinquete, retire la bujía girándola en sentido contrario a las agujas del reloj.
Compruebe la separación: Utilice la galga de separación para comprobar la separación de la bujía nueva y ajústela según sea necesario.
Instale la bujía nueva: Instale la bujía nueva enroscándola en el motor con la mano y apretándola después con la llave de bujías y la carraca.
Sustituya el cable de la bujía: Vuelva a instalar el cable de la bujía empujándolo sobre la bujía nueva. Repita el proceso con todas las bujías.