Cuando se acerca el sorteo de la lotería de Navidad, mucha gente piensa en comprar algún décimo en Doña Manolita o en La Bruixa d'
Hablamos de la Administración de Loterías Nº 1 de Luque regentada por Miguel Molina, quién ha repartido cuatro premios de los sorteos extraordinarios de Navidad celebrados en los últimos tres años.
En 2014, fue precisamente el propietario de la administración el agraciado con dos décimos premiados con segundo premio del Sorteo de Navidad. Pocos días después, en el Sorteo del Niño, Miguel Molina repartía también 750.000 euros del segundo premio.
En 2015, la única administración de Luque repartía 1,2 millones de euros tras vender 10 décimos del segundo premio del Sorteo de Navidad. El pasado año, la suerte volvería a visitar a este municipio de la Subbética por tercer año consecutivo dejando dos décimos agraciados con el segundo premio del Sorteo de Navidad.
Miguel Molina asegura que esta lluvia de millones ha hecho que “las ventas se hayan incrementado en torno al 40% en los últimos años”. Es tal el volumen de ventas que ha alcanzado esta administración de loterías de Luque que ya hace días que se agotaron todos los décimos para el sorteo del próximo 22 de diciembre: “Ya me han dejado sin décimos, ya sólo puedo sacar números de la máquina”.
El propietario de la administración confía en volver a repartir premios por cuarto año consecutivo: “este año vamos a por ‘El Gordo’”. Las paredes del establecimiento repletas de recortes de periódicos y números de lotería premiados dan fe de la buena suerte que tiene el establecimiento de este municipio de algo más de 3.000 habitantes.
“Gente de Córdoba, Jaén, Granada y todos los pueblos de alrededor de Luque” se han convertido ya en clientes asiduos de una administración tocada por la varita que confía en seguir repartiendo suerte y hacer un poco más ricos a sus clientes esta Navidad.
Repartiendo premios desde su apertura
A la administración de Loterías de Luque no sólo se le da bien los sorteos de Navidad. Y es que Miguel Molina lleva repartiendo premios prácticamente desde la apertura de la oficina en 1986.
En el año 1996, cuarenta décimos agraciados con el primer premio de la Lotería Nacional repartía más de 160 millones de las antiguas pesetas entre sus clientes.
El mayor premio vendido hasta la fecha por Miguel llegó el 6 de diciembre de 2003, precisamente hace ahora catorce años. Un único acertante obtuvo la friolera de 3,4 millones de euros en el sorteo de la Bonoloto. El agraciado fue un inmigrante búlgaro desplazado a Luque para trabajar durante la campaña de las aceitunas.
Como el dinero llama al dinero, ese mismo año la administración de Luque vendía el cuarto premio del Sorteo Extraordinario de Navidad.