El viernes 13 se ha materializado como esa fecha de mala suerte que representa en muchos sitios. A media tarde de ayer ardía un autobús de la empresa Carrera cuando estaba entrando a Rute desde Iznájar. En concreto, hacia las seis y veinte en la Jefatura de Policía comenzaron a recibir múltiples llamadas. Todas alertaban de que un autobús se había incendiado en la carretera A-331 a la altura del antiguo Hotel María Luisa. En concreto, el autobús siniestrado subía por el carril de vehículos lentos, cuando comenzó a arder por causas que se desconocen. De inmediato, la patrulla del turno de tarde se desplazó al lugar y se activaron los servicios de emergencia.
Al ver salir humo desde las rendijas del motor, en la parte trasera, el conductor logró desviarlo hasta el cruce de la antigua carretera de La Hoz. Apenas lo había redirigido junto a la cuneta cuando el autobús prendió con rapidez, provocando una humareda que durante un buen rato se pudo ver en todo el casco urbano de Rute. Pese a lo llamativo de las imágenes, por fortuna, en ese momento el autobús no llevaba pasajeros, por lo cual no ha habido que lamentar daños personales. Eso sí, el vehículo ha quedado totalmente calcinado y las llamas han alcanzado a una finca y una vivienda cercanas, aunque sin mayores consecuencias.
La rápida actuación de los servicios que se han desplazado al lugar ha evitado una situación más grave. En las tareas de extinción han participado miembros de la Policía Local, Guardia Civil de Tráfico, voluntariado de Protección Civil de Rute, Servicio de Conservación de Carreteras y una dotación del Cuerpo de Bomberos de Lucena. Una vez sofocadas las llamas, durante el resto de la tarde la Policía ha permanecido en el lugar regulando el tráfico. Por su parte, el Servicio de Conservación ha señalizado el lugar, habilitando un carril adicional, mientras llegaba una grúa para retirar el vehículo.
Al haber ardido por completo, va a ser difícil determinar las causas exactas del incendio. No se descarta que se haya recalentado por la temperatura tan alta del exterior. Como en muchos puntos de Andalucía, a esa hora en Rute se superaban ampliamente los 40 grados. Pero tampoco se ve como imposible que se debiera a que algún líquido fuera a la zona del tubo de escape o que incluso se debiera a un fallo eléctrico. En cualquier caso, el amasijo al que ha quedado reducido el autobús va a impedir dar respuesta a ninguna de estas hipótesis.
