Bajo el nombre La truficultura, un complemento a los sistemas forestales, se ha celebrado en el municipio de Zuheros una actividad de carácter teórico-práctica para dar a conocer iniciativas experimentales y empresariales sobre la trufa en el Geoparque Sierras Subbéticas. Un encuentro que forma parte del programa de participación y sensibilización ambiental que se está desarrollando en los tres Parques Naturales de la provincia: Sierras Subbéticas, Sierra de Hornachuelos, y Sierra de Cardeña y Montoro, según ha informado el delegado de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, Juan Ramón Pérez Valenzuela.
La actividad sobre la truficultura ha contado con la participación de un grupo de alumnos del IES Felipe Solís, de Cabra, así como personas interesadas que se han desplazado desde otras provincias, en concreto, desde Málaga y Granada. El programa ha ofrecido diversas ponencias, que se han desarrollado en la Casa de la Cultura de Zuheros. Posteriormente, los asistentes se han desplazado al Cerro de los Murciélagos para tratar al aire libre cuestiones como la búsqueda de trufas o la actuación de los perros truferos, que han realizado una exhibición para esta ocasión.
El delegado ha resaltado que la iniciativa busca “fomentar alternativas de cultivo que enriquezcan las tradicionales y pongan en valor la trufa como recurso ecológico para la economía”. De hecho, en la jornada han participado representantes de empresas de la comarca de la Subbética que además de investigar en este campo desde hace más de 20 años ofrecen asesoramiento a propietarios en todo el proceso para cultivar trufa”. Asimismo, durante las jornadas, se ha podido conocer el servicio que se ofrece tanto de estudio como de elección de suelos, plantación, seguimiento, labores agrícolas o silvícolas, riegos, recolección de trufas y sobre el denominado ‘tuber-turismo’.
Durante las jornadas se ha podido conocer que España es uno de los países con mayor producción de trufa negra silvestre y, sin embargo, hasta hace pocos años, no se había prestado mucha atención al cultivo de la trufa. En la actualidad, la situación socioeconómica obliga buscar nuevas fuentes de empleo y nuevas alternativas para los campos españoles. En este sentido, el delegado ha señalado que “el cultivo de la trufa es una de estas alternativas, sobre todo en zonas montañosas, de economía deprimida, en zonas agrícolas abandonados y en olivares de montaña que han perdido su rentabilidad por competencia con olivares instalados en zonas llanas con nuevos métodos agronómicos”. En definitiva, Pérez ha concluido que “cultivar trufas resulta muy rentable y tiene un nicho libre para su cultivo”.
Respecto a la experiencia de la truficultura en el Parque Natural, el delegado ha informado de que “en las Sierras Subbéticas existen en la actualidad varias fincas forestales que, bien por iniciativa propia, o bien como proyecto piloto de la Consejería que represento, han apostado por la plantación de encinas micorrizadas en trufa cuyos resultados están siendo más que satisfactorios”. En este sentido ha añadido que “la idea es mostrar que ya existen estas experiencias positivas que se pueden replicar bien como complemento a los sistemas forestales actuales o bien como alternativa al cultivo del olivar. En un contexto de cambio climático la diversificación de cultivos es una apuesta necesaria para anticiparse a posibles escenarios no deseados”.
La actividad sobre la truficultura celebrada en Zuheros es una de las 21 programadas y que se llevan celebrando en el Parque Natural Sierras Subbéticas desde junio de 2021. Este programa cuenta con una inversión de 47.000 euros y se prolongará hasta 2023. Aún quedan 8 actividades por desarrollar, tanto acciones de participación, de sensibilización y talleres como jornadas temáticas.
Las acciones van dirigidas de forma prioritaria a la población residente en los municipios del ámbito de influencia de los espacios protegidos y, en concreto, a la asociaciones y colectivos de la zona, entidades locales, a la comunidad educativa y, en definitiva, a la población general que tengan interés en el medio ambiente y en alcanzar un desarrollo sostenible. El objetivo de estas actividades persigue la concienciación ciudadana sobre la conservación de la biodiversidad y la mejora del medio natural, fomentado actitudes acordes con los usos sostenibles y tradicionales de los recursos y valores ambientales que alberga estos espacios.