Quedan horas para medirse ante Portugal en las semifinales del Europeo. No hay duda de que será un partido clave y los medios preguntaban si había sed de venganza. Desde el primer momento, tanto Boyis como Fede Vidal lo dejaban claro: "Venganza no es la palabra". Tanto el seleccionador como el jugador tienen claro que será un partido crucial y que llegados a este punto no hay favoritos, ya que todo se decide por pequeños detalles que hay que trabajar día a día.
En ese aspecto, los integrantes de la Selección Española de Fútbol Sala sí que llegan con confianza: “La connotación que tiene la palabra favorito lleva un sentido de blanco o negro. En este tipo de partidos todo es gris. Nos sentimos favoritos en el ámbito de la confianza en el trabajo realizado. Nuestro principal motivo para sentirnos favoritos es ese. El concepto que se le quiera dar fuera en función de los resultados se puede ver de muchísimas maneras. En el Mundial salió de parte de Portugal y no creo que fuéramos inferiores a ellos y en los encuentros posteriores contra ellos tampoco. Es una competición muy igualada y en las semifinales están cuatro de esos equipos favoritos, por lo que el que quiera llevarse el Europeo va a tener que hacer dos partidos perfectos”.
Boyis, por su parte, habló de la presión antes del partido: “La verdad que el día de antes siempre hay nervios pero con muchas ganas de que llegue el momento. Llevo mucho tiempo trabajando para vivir un momento así. Queremos hacer las cosas bien y ojalá podamos ganar este partido”. Sin embargo, tiene claro que el resultado final dependerá de si se aplican concretamente los aspectos trabajados durante cada entrenamiento y cada sesión de vídeo: "La clave somos nosotros y tenemos que hacer un partido casi perfecto si queremos ganar. En el grupo veo muchísima ambición”.